Todas las mujeres cuando comienzan a entrenarse suelen caer en algunos errores típicos que muchas veces se siguen cometiendo porque no hay nadie que las oriente o porque su entrenador no les presta la atención que se debe o no las corrige cuando debe ser.
1.Repetir demasiado un ejercicio.
Cuando se está en el gimnasio se suele seguir una rutina de ejercicios, el problema está que la repiten y repiten y repiten hasta el cansancio lo cual está mal ¿Por qué? Porque el cuerpo, al ser una máquina perfecta, se adapta a los cambios y por ende esa rutina que hacemos todo el tiempo deja de tener un impacto en nuestros cuerpos. Hay que intentar cambiar la rutina cada 2 semana para que así los músculos no se acostumbre, si no sabes qué hacer acércate a tu entrenador para que te oriente.
2.No entrenar con pesas o no entrenar pesado.
Es usual que veamos a muchas mujeres en la zona de cardio pero muy pocas veces en la de musculación todo por el hecho de que tienen el estereotipo de que las mujeres no deben entrenar con pesas ni con pesos altos.
Lo primero que hay que aclarar es que ambos géneros pueden entrenar con pesas, es indiferente, la cantidad de peso siempre va a variar dependiendo de la persona y su capacidad, he visto mujeres trabajar con mancuerdas de 20 libras en cada mano trabajando premilitares, mientras que a algunos hombres les cuesta con unas de 10 libras pero eso sencillamente es un tema que depende mucho de cuánto tiempo tienen entrenando y con qué intensidad. Si eres mujer y te la pasas en la zona de cardio si puede que reduzcas las tallas pero tu cuerpo no se verá tonificado (igualmente con los hombres) es allí donde entra en juego el trabajo con pesas.
Al trabajar con pesas no se quiere decir que vas a empezar con mancuerdas de 10 libras en cada mano haciendo elevaciones laterales cuando ni siquiera sabes si puedes hacerlas con 8 libras o un peso menor, todo es progresivo. Lo importante no es trabajar con el mayor peso que veas en el gimnasio, sino trabajar con aquel que tu cuerpo pueda manejar.
El segundo punto a desmentir es que las mujeres no pueden entrenar pesado, totalmente falso, lo correcto sería decir que alguien no puede entrenar pesado (independientemente de su género) si su cuerpo no está preparado para ello ¿Cómo así? Una persona que solo trabaja pesos livianos o no se ha centrado en fortalecer su espalda, hombros y zona lumbar corre el riesgo de lesionarse.
Tercero, los hombres no son los únicos que pueden desarrollar fuerza en los músculos, las mujeres también lo pueden hacer, además que al entrenar con pesas vas a desarrollar masa muscular lo que te ayudará a oxidar más grasa cuando estés en reposo y a lucir una figura más definida.
4.El espejo se convierte en una obsesión.
El espejo siempre será tu mejor aliado en el gimnasio debido a que gracias a el es que nos damos cuenta cuando estamos realizando mal una técnica o cuando nuestra postura no es la correcta, sin embargo algunas chicas caen en el error de voltear cada minuto para verse a modo de adulación o para aprovechar la rutina del gimnasio y hacerse toda una sesión de fotos lo cual no solo afecta nuestro entrenamiento sino que también molesta a los demás.
5. “Solo hago ejercicios de mujeres”
No existen ejercicios exclusivos para hombres y mujeres, esto es un error que suele cometerse de manera muy frecuente al momento de entrenar. Algunas personas suelen pensar que hacer glúteos es un ejercicio solamente destinado para las féminas lo cual es mentira, así como las mujeres tienden a decirle a sus entrenadores que no quieren hacer bíceps porque eso es de hombres ¡Error! ¿Qué son los glúteos y los bíceps? Músculos ¿y qué vas a entrenar en el gimnasio? Músculos ¿Entonces cuál es el problema?
Hay que entrenar de forma equilibrada, no solo un grupo muscular para así lograr un cuerpo armonizado, buscar entrenar el cuerpo con un todo. Si tu entrenador por casualidad define los ejercicios de piernas o glúteos como “ejercicios de mujeres” creo que es momento que vayas evaluando cambiar a otro.
6. No confiar en ustedes mismas
Las mujeres mayormente son muy inseguras, la falta de confianza puede afectar muchos ámbitos de la vida y el entrenar es uno de ellos. Es usual que si eres una persona con sobrepeso llegues al gimnasio pensando que te van a juzgar por tu figura o que te verán mal, ese tipo de pensamientos hay que dejarlos de lado y concentrarse en lo que se ha venido a hacer y sobre todo hay que enfocarse en que ya has dado un enorme paso al estar allí en el gimnasio.
Otro punto donde la confianza se viene abajo es cuando nos ponen una rutina que a primera vista parece ser imposible, sin embargo la mayoría de las veces es una exageración de nuestras mentes lo malo es que si nos creemos eso entrenaremos por muy debajo de nuestra capacidad, lo que hará que no lleguemos a dar ni el 60% de lo que somos capaces. Una mente sin prejuicios, enfocada combinada con una actitud perseverante será tú mejor herramienta al momento de enfrentar cada ejercicio de tu rutina, te sorprenderías de lo que puedes lograr si confías en ti misma.
Recuerda, sé tú misma la voz de apoyo que necesitas.
«Redacción Zigmaz»
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Estudiante de Comunicación Social, amante de los videojuegos y del entrenamiento al aire libre.