¿Recuerdas qué es lo que piensas cuando tienes un orgasmo? Muy probablemente, no. Cuando practicas sexo con tu pareja no te enteras de absolutamente nada, ya se puede estar acabando el mundo, que no, que mejor estar a lo tuyo. El cerebro actúa por su cuenta, tu cuerpo por otro y tú mismo/a te trasladas a otro planeta, eso es así. Queda claro que no puedes ser consciente de todo, así que nosotros te explicamos lo que dicen los científicos que pasa en ese momento de apogeo sexual máximo.
La mayor parte de nuestro cuerpo cuando tiene un orgasmo se descontrola o simplemente sentimos que no pensamos, ya que el cerebro actúa por si mismo. Pero mira lo que le sucede a tu cuerpo cada vez que tiene un esa gran sensación de un orgasmo.
Qué! Nos cuenta en su portal sobre algunos datos muy curiosos de que le sucede a nuestro cuerpo cada vez que tenemos un orgamo.
Contracciones o calambrazos
Las mujeres, en este caso, tenemos mucha más suerte que los hombres porque el orgasmo de ellas puede durar muchísimo más. Se calcula que aproximadamente el masculino suele tener una corta duración de entre tres y ocho segundos, mientras que el de las mujeres se puede alargar muchísimo más debido a las contracciones que se experimentan a la vez en el útero, vagina y ano, por lo que pueden durar más o menos, llegando a veces hasta casi un minuto. Pero no te hagas ilusiones, que lo normal es que sean unos 10 segundos, o incluso menos.
No solo se contraen estos músculos del cuerpo, sino también otros como los dedos de los pies de forma involuntaria. Los hombres no experimentan dichas contracciones, sino que su orgasmo se puede definir mejor como un calambrazo o cosquilleoque dura apenas unos segundos muy intensos en los que sienten el máximo placer.
El centro del placer cerebral
El cerebro es el principal aparato que interactúa en el momento del sexo y, efectivamente, existe un centro del placer al que se le llama circuito de recompensa que actúa en el momento del orgasmo, aunque también en otros como cuando nos reímos o disfrutamos con algo. Se encienden muchísimas áreas en el momento del coito, como la amígdala, que es la encargada de las emociones, la glándula pituitaria para liberar endorfinas y oxitocina, hormona que provoca las contracciones en las mujeres y el cerebelo para que se coordinen los movimientos musculares. La dopaminatambién se libera en el momento del sexo para provocar el estímulo del placer.
Reducción del dolor
Muchas mujeres han escuchado hablar en varias ocasiones de que si se mantienen relaciones sexuales, y se consigue un orgasmo con ellas, cuando se está menstruando, el dolor que se siente disminuirá considerablemente. Esto es completamente cierto, ya que se cree que las mujeres son la mitad de sensibles al dolor durante el clímax que normalmente debido a unas conexiones entre las zonas del cerebro y la médula espinal que hacen que el dolor se solape. Otras zonas cerebrales inhiben la sensación de dolor precisamente para dar paso a la contraria, la del placer absoluto.
Después del coito
La sensación de después del orgasmo y del sexo en general también tiene una explicación científica por las sensaciones que experimenta nuestro cuerpo. Todas las sensaciones siguen perdurando en él y, tanto hombres como mujeres, se sienten mucho más relajados por la liberación de la hormona de la serotonina, encargada de la somnolencia a la hora de dormir, ya que cuanta más se produzca en el cuerpo, mejor.
También el orgasmo reduce el estrés y la ansiedad, además de que las sustancias químicas que se liberan durante el sexo producen una recompensa en el cerebro que produce autoestima y felicidad.
Redacción ZigmaZ
