El pasado 25 de octubre de 2015 fue electo el comediante e inexperto político, Jimmy Morales, como nuevo presidente de Guatemala, tras imponerse en la segunda vuelta de los comicios generales. Ahora enfrentará una compleja situación para cumplir su compromiso de combatir la corrupción, en un país sumido en la pobreza y la inseguridad.
Morales, de 46 años, se impuso con casi 70% de los votos a su contrincante, la ex primera dama socialdemócrata, Sandra Torres.
En su primera comparecencia pública el mandatario electo ratificó que su prioridad será el combate frontal a la corrupción, tras los escándalos que provocaron la renuncia y encarcelamiento del ex presidente, Otto Pérez.
Antecedentes
No es el primer comediante en la historia política de Guatemala. En 2011, el actor televisivo, Juan Pablo Urrea, fue nombrado diputado por otro grupo político conservador y nacionalista: el Partido Patriota (PP).
Y ese mismo año, Morales quedó en tercer lugar en las eleciones para la alcaldía del municipio de Mixco, en las que representó al extinto partido Acción de Desarrollo Nacional (ADN), un grupo de derecha que no logró obtener el umbral de votos necesario para su supervivencia.