No todo es deporte y alegría al lograr la meta propuestas por muchos atletas, mira lo que sucede en la Villa Olímpica.
El portal GloboEsporte.com tituló «Sexo por dinero, hurtos y hormonas en ebullición”, un informe que refleja todos los casos policiales en Río 2016, muchas de las historias que se manifiestan es de oferta sexual cuyo precio puede variar, sin olvidar los hurtos de pertenencias de los atletas, y muchas locuras más que viven. Revelaron el caso de un hurto de 20 mil reales. El sábado, el director de comunicaciones de Río 2016, Mario Andrada, lo confirmó y anunció que fue detenido el empleado al que se le encontró el dinero. Indicó, «Fue detenido y se le devolvió el dinero a su propietario».
Gracias a la información de lanacion.com.ar. Según el informe, la oferta sexual son por ambas partes, tanto en los empleados de ambos sexos, como por los participantes de los juegos, el anunciado refleja que algunos atletas ofrecerían 500 reales para tener relaciones sexuales.
Las locuras siguen
Hassan Saada, de 22 años es un boxeador marroquí que participaría en la categoría de hasta 81 kilos, fue acusado por dos camareras de acoso sexual, fuentes policiales relatan que el joven llamó a las dos empleadas para la habitación para pedir información, cuando el deportista frente a otros dos atletas, las acosó físicamente antes de que ellas pudieran huir.
El otro caso que se conoció fue el del boxeador Jonas Junias de Namibia, fue acusado por acoso sexual por una camarera, el atleta fue trasladado a la comisaria de Recreio, donde luego fue custodiado al complejo penitenciario de Bangu. Pero fue liberado bajo un hábeas corpus presentado por su defensa.
El día de ayer la seguridad en Río de Janeiro durante los juegos Olímpicos, se volvieron a colocar en duda. Ryan Lochte, Gunnar Bentz, Jack Conger y Jimmy Feigen, fueron abordados por hombres vestidos de policías en la madrugada del domingo, cuando ellos regresaban en taxi de una fiesta en el barrio de Jardim Botanico a la Villa de los Atletas, en Barra de Tijuca.
Patrick Sandusky vocero del comité olímpico de Estados Unidos confirmó, “Su taxi fue detenido por individuos que se hicieron pasar por agentes de policía armados y exigieron el dinero y otras pertenencias personales de los atletas. Los cuatro deportistas están bien y están cooperando con las autoridades”, mientras que el comité organizador de Río 2016 había calificado como «falsas» las informaciones que empezaron a surgir más temprano.