CEO de Volkswagen, Martin Winterkorn, renunció el miércoles, asumiendo la responsabilidad por la falsificación de pruebas de emisiones de contaminación en aproximadamente medio millón de automóviles que el fabricante alemán le vendió a los Estados Unidos, resultando este el mayor escándalo en su 78 años de historia.
«Volkswagen necesita un nuevo comienzo. También en términos de personal estoy despejando el camino para este nuevo comienzo con mi renuncia«, dijo Winterkorn en un comunicado.
Reveló que estaba sorprendido por los acontecimientos de los últimos días, sobre todo que la mala conducta en una escala tan masiva.
Los fiscales alemanes dijeron el miércoles que estaban llevando a cabo una investigación preliminar sobre la manipulación de los resultados de las pruebas de emisiones de contaminación de vehículos de Volkswagen, mientras que el Ministro de Energía Francesa, Segolene Royal, dijo que para su país sería una falta «extremadamente grave» si su investigación sobre la empresa, sí encuentra algún delito.
Las autoridades estadounidenses están abriendo investigaciones penales después de descubrir que Volkswagen programaba computadoras en sus coches, para detectar cuando se están probando y alterando el funcionamiento de sus motores diésel para ocultar sus verdaderas emisiones.
La canciller alemana, Angela Merkel, había instado a Volkswagen a resolver «lo antes posible» el problema y restaurar la confianza de la empresa, ya que por generaciones ha sido vista como un modelo a seguir, además de la ingeniería alemana es un orgullo para su nación.
La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) , denunció el viernes que Volkswagen podría enfrentarse a penas de hasta $ 18 mil millones por tratar de engañar las pruebas de emisiones en algunos de sus vehículos diésel. En los Estados Unidos se volvió tendencia en la red social Twitter el hashtag #Dieselgate debido a las personas que usan carros diésel en este país . Los motores diésel representan menos del 3% de los coches nuevos vendidos en los Estados Unidos, pero alrededor de la mitad de los automóviles en Europa , donde los gobiernos han fomentado su uso para cumplir los objetivos de eficiencia de combustible y gases de efecto invernadero.
La mayor fortaleza de la empresa era su economía del combustible y las bajas emisiones de carbono en comparación con los motores de gasolina estándar. Pero también emiten más dióxido de nitrógeno, un gas tóxico culpado por problemas de salud. La sugerencia de que sus emisiones en condiciones reales son peores que los reportados en pruebas podría perjudicar a todo el sector y alterar el futuro de la industria del automóvil en todo el mundo.
Redacción ZigmaZ
