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En la ciudad de Lake Worth, Florida, el nombre del Sensei Marco Antonio Osorio Uzcátegui ya es sinónimo de disciplina, formación y pasión por las artes marciales. En poco tiempo, este venezolano con más de 40 años de experiencia en el karate ha logrado mucho más que impartir clases: ha transformado la manera en la que niños y jóvenes del condado de Palm Beach se acercan a este arte milenario.
Marco Osorio ha desarrollado un estilo de enseñanza que fusiona la tradición del karate con métodos modernos y dinámicos, convirtiendo cada clase en una experiencia enriquecedora. Su enfoque no se limita al dojo; el Sensei lleva sus entrenamientos a playas, parques y escuelas, logrando una conexión más cercana con sus alumnos en entornos naturales y accesibles para todos.
Una de sus participaciones más destacadas en 2023 fue durante el Summer Camp de la Escuelita Maya, donde instruyó a más de 140 niños de distintas edades. A pesar del gran número de participantes, las jornadas se desarrollaron con un admirable nivel de orden, concentración y entusiasmo. La energía en el ambiente era contagiosa y el compañerismo, evidente.
Docentes de la institución destacan cómo Osorio logra captar la atención de los niños utilizando herramientas como pelotas, cuerdas, aros y globos, transformando cada clase en una actividad educativa, divertida y profundamente formativa. “El karate, en sus manos, se convierte en una herramienta de crecimiento integral”, comentó una de las maestras del plantel.
Su carisma, creatividad y vocación educativa lo han convertido en una figura admirada dentro y fuera del tatami. La comunidad no solo lo reconoce como instructor de karate, sino como un verdadero maestro de vida. Enseña con el corazón, corrige con respeto y guía con el ejemplo.
Como bien señala un refrán que parece describirlo a la perfección: “Cualquiera puede enseñar, pero pocos pueden ser verdaderos Maestros.”
Redacción Zigmaz
