A raíz del encuentro que tuvo la actriz Kate del Castillo y el periodista Sean Peen, con Joaquín Guzmán Loera mejor conocido como el Chapo, el gobierno estadounidense se ha visto en la obligación de abrir las investigaciones respectivas sobre este caso.
Recientemente un reporte de las autoridades, señala que los acuerdos entre Kate del Castillo y Joaquín Guzmán podrían considerarse como una violación a la Ley de Designación de Traficantes Extranjeros en Estados Unidos, la cual prohíbe a los ciudadanos de ese país negociar con líderes criminales que se encuentren registrados en la Oficina para el Control de Activos Extranjeros.
Se presume que en el encuentro con Guzmán se mantuvieron conversaciones de otros negocios, en donde el capo estaría interesado en la inversión de empresas en Estados Unidos. Siendo estos dos temas, el interés principal del gobierno estadounidense. Lo que mantiene en aprieto a la actriz, quien solo tenía cuatro días con su nacionalidad americana al momento de reunirse en Sinaloa con el líder del cartel.
Según el gobierno, por la condición de ciudadano de Kate, Sean Penn y los dos productores (uno español y uno argentino), podrían estar acusados de violación a la ley, por haberle brindado presuntamente apoyo al Chapo, al no dar a conocer sobre su paradero a las autoridades de la nación. De estar en lo cierto, estas cuatro personas involucradas estarían en riesgo de cumplir una pena de 10 años de cárcel, además del pago de la multa.
Redacción Zigmaz
