El joven tatuador venezolano José Fariñas sigue dejando huella en la escena artística nacional con su más reciente proyecto: el seminario “A Todo Color”, una iniciativa formativa y cultural que agotó entradas en apenas cuatro días y tuvo tal demanda que obligó a sus organizadores a abrir una segunda fecha no planificada.
“Teníamos esta idea desde hace tiempo, pero queríamos ofrecer más que solo conocimientos técnicos; queríamos crear una experiencia inolvidable. Y así fue. Tuvimos un sold out total y aún quedó gente por fuera”, expresó Fariñas, visiblemente emocionado por la receptividad del evento.
Celebrado a finales de junio, el seminario reunió a aprendices, profesionales del tatuaje y amantes del arte urbano en una jornada intensiva donde se abordaron temas como la anatomía de la piel, técnicas de color, teoría del arte, conversatorios en vivo, demostraciones prácticas de tatuaje y mucho más. Todo ello en un ambiente cargado de inspiración, aprendizaje y colaboración.
Más que tatuajes: arte en todas sus formas
Uno de los momentos más destacados del evento fue la galería colectiva que formó parte de la experiencia. En ella, participaron reconocidos artistas del grafiti y muralismo como Badsura, Droik, Hank, Aswed y el propio Fariñas, quienes exhibieron sus obras con el objetivo de ampliar la visión artística de los asistentes.
“La idea era que los participantes no solo aprendieran a tatuar, sino que también entendieran el tatuaje como una extensión del arte. Que vieran otras disciplinas y se inspiraran para crear desde múltiples perspectivas”, comentó el artista.
Ecléctica Producer y FariñasFilms respaldó el seminario “A Todo Color” posicionándose como un evento pionero que trasciende lo técnico para convertirse en una plataforma de crecimiento artístico colectivo.
Con tan solo 20 años, José Fariñas ya es considerado una de las jóvenes promesas del arte del tatuaje en Venezuela. Su enfoque va más allá de la aguja: busca integrar disciplinas como la pintura y la escultura para explorar nuevos lenguajes estéticos y ampliar su impacto visual.
“Quiero llevar mi trabajo a otro nivel. Me interesa crear piezas tridimensionales que puedan exhibirse como arte decorativo, algo que también atraiga a arquitectos y diseñadores de interiores. Mi visión va más allá del tatuaje; es artística y espacial”, afirma con convicción.
Fariñas también destaca que uno de sus principales objetivos es fortalecer la comunidad artística nacional:
“El tatuaje ha evolucionado enormemente y Venezuela está muy bien posicionada en ese ranking de talentos. Pero más allá de crecer individualmente, quiero hacerlo junto a mi tribu, como un movimiento colectivo”.
Para conocer más sobre sus próximos proyectos y futuros seminarios, los interesados pueden seguirlo en Instagram como @josefariastattoo.
Redacción Zigmaz /NP