Luego del atentado terrorista ocurrido el pasado 22 de marzo en la capital Belga, uno en el aeropuerto de Zaventem y el otro en el metro de Maelbeek, a pocos metros de las instituciones comunitarias, un aproximado de mil personas de todo el mundo fueron convocadas para entonar canciones promoviendo la paz en el país que fue blanco reciente del grupo terrorista Estado Islámico.
Se reunieron el 3 del presente mes en la plaza de la Bolsa de Bruselas, convertida en memorial desde el doble atentado, para corear a todo pulmón canciones bajo el lema “Música para Bruselas: una ciudad, un amor”.
Peter Spaepen se encargó de dirigir las piezas que entonaron los casi mil asistentes al encuentro. Presentaron canciones en flamenco, en francés como “Moules frites”, del cantante belga Stromae, o “Bruxelles”, de Jacques Brel, y en inglés, “One love”, de Bob Marley, para expresar así su amor por Bruselas y su determinación de no rendirse ante el terrorismo.
Las instituciones culturales de Bruselas que han organizado el acto consideran que la “música reconforta y une, y es precisamente eso lo que Bruselas, Bélgica y el mundo entero necesitan”. Expresaron que este fue el motivo de la convocatoria.
El doble atentado dejó un saldo de 32 muertes y centenares de heridos en la capital del país europeo, siendo este el segundo en ser atacado por el Estado Islámico.